Ten Hag-Arteta: decisiones de entrenador
La Premier League abraza entre dos de sus equipos a dos entrenadores que han demostrado, además de unos interesantes conocimientos futbolísticos, tener una valentía notable a la hora de tomar decisiones.
Decisiones tan arriesgadas como complicadas, tan cuestionadas como (incluso) polémicas. En el norte de Londres, Mikel Arteta; en la zona Red Devil de Manchester, Erik ten Hag. Dos entrenadores que llegaron a sus respectivos clubes con el objetivo de sacar adelante sendos proyectos que no atravesaban el mejor momento de forma.
Mikel Arteta puede estar firmando su temporada más destacada en su carrera como entrenador profesional. Más allá de la fructífera dinámica en Premier League (en la que sueñan sin complejos con ser campeones), desde su llegada a finales de 2019, el guipuzcoano ha demostrado que sus dotes técnicas sumadas a lo aprendido en Manchester con Guardiola le han convertido en un entrenador llamado a hacer cosas interesantes en el mundo del fútbol.
Erik ten Hag saltó al primer plano mediático en el fútbol europeo con su recordado Ajax de Ámsterdam, en 2019. Un equipo que llamó la atención de conocidos y extraños, y en el cual destacaron futbolistas como Frenkie de Jong, Matthijs de Ligt, Dusan Tadic, Daley Blind, Nico Tagliafico o Donny van de Beek. Aquella temporada no supuso la fugaz salida de ten Hag, como sí ocurrió con alguno de los jugadores anteriormente citados, pero sí le puso en el mapa futbolístico. Y, partiendo de aquel contexto, llegó esta temporada al Manchester United.
Ambos no sólo han mejorado notablemente a sus respectivos equipos, sino que firmaron decisiones muy arriesgadas que presentaban diversos comentarios. Por un lado, su personalidad, su toma de decisiones. Por otro lado, las posibles consecuencias. Movimientos que podrían tener resultados adversos, pero no por ello silenciaron su lógica deportiva.
Mikel Arteta no sólo dejó de contar con Pierre-Emerick Aubameyang (capitán del Arsenal, por aquel entonces), sino que acabaría saliendo con destino Barcelona. Desde entonces, casualidad o no, el rendimiento de los Gunners mejoró notablemente. Mejoró la pasada temporada y en el presente curso han dado un extraordinario paso adelante en el que pueden ser campeones de liga en territorio inglés. Una decisión que, vista ahora, fue un acierto. Un acierto no falto de riesgo, claro está.
Erik ten Hag, algo similar. Algo similar porque, en un principio, fue el técnico que decidió no contar con Cristiano Ronaldo en el Manchester United. Una decisión cuanto menos cuestionable hace años, pero no ahora. Ahora no. El delantero portugués estaba lejos de su mejor nivel y, sumado a su siempre cuestionable personalidad, provocó que el técnico neerlandés tomara una decisión objetiva: si el resto estuvieran así, no jugarían. Y así actuó con Cristiano Ronaldo. Casualidad o no, el conjunto de Old Trafford mejoró notablemente y jugadores como Marcus Rashford volvieron a despegar deportivamente desde que el luso rescindió contrato y se marchó a Arabia Saudí.
El técnico del Arsenal apartó rotundamente a su capitán. El técnico del Manchester United dejó en el banquillo a uno de los delanteros más laureados de la Historia. Dos decisiones basadas en valentía, en una personalidad intratable y enfrentándose sin complejos ni tapujos a las posibles consecuencias negativas. No llegaron las consecuencias negativas, todo lo contrario, y ambas figuras brillan con luz propia.